La Unión Europea importa alrededor de USD 4.7 mil millones de Centro América, lo cual equivale a un 15% de las exportaciones totales anuales de nuestra región. Los productos agrícolas representan un poco más de USD 2 mil millones del total. Ahora bien, más del 55% las importaciones europeas provienen de países en desarrollo, y algunos productos provenientes de ex colonias en África, el Pacifico y el Caribe (los llamados países ACP) tienen un trato preferencial, como es el caso del banano y del azúcar. Esta tradición europea puede representar una buena oportunidad para nuestra región, si a través del Acuerdo de Asociación entre la América Central y la Unión Europea se logra algún reconocimiento a los productos agrícolas certificados, y en especial a los certificados con el sello Rainforest Alliance, como café, banano, cacao, piña, entre otros.
Impulsar la sostenibilidad
Es interesante destacar que el 70% de los productos agrícolas exportados a Europa no poseen ningún valor agregado. El café, el principal rubro de exportación agrícola de la región, se lleva uno de cada tres dólares recibidos de Europa. El banano y la piña constituyen el segundo y tercer producto de exportación respectivamente. Para el caso del banano, la mayoría de las fincas certificadas que le venden a las grandes compañías como Chiquita, son de productores independientes, muchas veces agrupados en cooperativas. Muchos ambientalistas y promotores de un desarrollo sostenible, incluyendo a este servidor, consideran que el sistema europeo de tarifas o aranceles realmente no ha sido muy beneficioso y lo mejor sería que esos mismos recursos financieros se devuelvan a proyectos que impulsen la sostenibilidad para los pequeños y medianos productores agrícolas, incluyendo al sector bananero, así como al sector azucarero, media vez se comience a certificar plantaciones de caña de azúcar en el futuro cercano.
Y es que uno de los grandes retos que se tienen dentro del programa de certificación Rainforest Alliance es precisamente como educar a los finqueros sobre la importancia de la diversidad biológica y el concepto de sostenibilidad. Posiblemente, parte de la cooperación que surja del Acuerdo puede destinarse para educación ambiental o educación para la sostenibilidad agrícola. De igual forma, otro reto que se tiene es como facilitar el acceso a la asistencia técnica para los micros y pequeños productores. El Acuerdo puede proporcionar incentivos económicos interesantes para que esto ocurra.
Tratamiento preferencial
Esta claro que este sistema de tarifas a las importaciones va en detrimento de la calidad de vida de todos los productores de nuestra región y no sólo de las grandes compañías agrícolas que exportan a Europa. Todos los productos certificados deberían tener preferencia en este acuerdo de Asociacion entre la Unión Europea y Centro América, y en especial los certificados Rainforest Alliance por su fuerte componente social y ambiental. Esta certificación genera sostenibilidad económica, además de la social y ambiental, brindando oportunidades de diferenciación y competitividad para que el sector agrícola se desarrolle, adaptándose de esa forma a una apertura comercial gradual con Europa. El impacto que pudiese tener un tratamiento preferencial por parte de la Unión Europea, por ejemplo, para la piña de Costa Rica, con sus más de 40,000 hectáreas sembradas, o para el café de El Salvador, que representa su masa boscosa mas extensa cubriendo un 10% de su territorio, puede ser sumamente positivo y atractivo en términos de impulsar una verdadera sostenibilidad de largo plazo, reconociendo un valor agregado para los productos certificados.
Es un hecho que la demanda global de productos Rainforest Alliance Certified esta creciendo de manera impresionante, en particular en Europa. Eso se debe al compromiso de algunas compañías para el concepto detrás del sello, pero también al incremento de los consumidores responsables que prefieren productos diferenciados y certificados que mejoran la calidad de vida de las personas y el medio ambiente. Sin embargo, los mercados son todavía muy pequeños y es necesario estimular mayor conciencia en el consumidor. Acá amerita evaluar, dentro del Acuerdo de Asociacion entre Centro América y la Unión Europea, el invertir en generar mayor conciencia en el consumidor europeo sobre la importancia de los productos certificados.
En definitiva, el mercado de tales productos certificados es un mercado verde con grandes oportunidades de crecimiento, y debería estudiarse su negociación dentro del Acuerdo por el bien de la diversidad biológica y de los trabajadores y productores agrícolas de Centro América.